Vivir con un colchón

En la vida, hay que tener un colchón. O, mejor dicho, DOS. Y por motivos bien distintos:

  • Para descansar el cuerpo (físicamente hablando, un colchón normal).
  • Y para descansar el bolsillo (si hablamos de finanzas, el llamado colchón financiero).

En cuanto a la primera razón, pues nada: te vas una tarde de tiendas, a poder ser un lunes, te vas tumbando por todos los colchones que estén disponibles, y eliges según la comodidad y el ratio calidad/precio.

Si eres de los que estudia todos los puntos y mira los pros/contras de cada modelo, te dejo una guía para tu próxima compra de colchón: guía elegir colchón.

Respecto al segundo punto…

Qué es un colchón financiero

Imagínate que un santo lunes mandas a tu jefe al lugar por donde amargan los pepinos. ¿Te gustaría, verdad?

Antes de hacerlo, si no tienes ingresos, deberías tener un colchón financiero. Una cantidad de dinero ahorrado que sea suficiente para pasar una temporada sin preocupaciones económicas.

Cuánto debo ahorrar

Los gurús de las finanzas domésticas sugieren que, al menos, deberías tener ahorrado para posibles emergencias o gastos extraordinarios lo siguiente: tus gastos mensuales x 12 (1 año). Es decir, si gastas 1200 euros al mes, deberías de tener como colchón financiero o fondo de emergencia unos 14400 euros en total.

Saludos tumbado en el colchón y arropado con un patchwork hecho de billetes de 500 euros.

Créditos: imagen original con licencia CC en https://www.pexels.com/photo/white-and-black-mattress-fronting-the-mountain-775219/