Felicidad: países felices.

Ahhhh… (suspiro) la felicidad… ¿países felices? ¿cuáles son?

Vamos con un breve acontecido/batallita:

Héctor, un compañero de la oficina aquí en putolunes, se fue de Erasmus a Finlandia cuando era joven (ha llovido bastante de aquello). Ha conservado varias amistades de esa época y, estos días, ha venido de visita un amigo suyo finlandés.

Mikko (se llama así, sí, como los helados) nos cae muy bien: es educado, habla con un tono de voz normal (no grita como hacemos los mediterráneos) y escucha atentamente las locas conversaciones de los compañeros de redacción.

El viernes pasado, durante el descanso del café, los compañeros estaban revolucionados, contando que tenían ya los décimos de la lotería de Navidad comprados. Uno sostenía en sus manos una revista de yates e incluso había marcado con rotulador el modelo que iba a comprar (dato curioso, teniendo en cuenta que vive en Segovia). Otro hablaba sobre decoración con maderas asiáticas para su futuro chalet en Menorca.

Tímidamente, Miguel (como le bautizamos desde el minuto uno), susurró unas palabras: «dinero no felicidades».

(silencio en la sala)

El dicharachero responsable de ventas que tenemos, que pasaba por ahí móvil en mano, le oyó y le animó a desarrollar esa enigmática frase. Miguel, se soltó un poco más. A pesar de su español imperfecto, nos contó que Finlandia era «oficialmente» el país más feliz del mundo…

(estupefacción general)

¡No puede ser! ¡Allí no hay sol! ¡Se suicidan! ¡No tienen bares! ¡Son unos sosos!

… prosiguió adelante y nos explicó que es bastante feliz en su país. Que sus vecinos valoran ciertas cosas además de poder liarse canutos con billetes de 500€. Rápidamente, con cara de tierra trágame, Héctor le agarró del brazo y ambos se alejaron por el pasillo.

Yo mismo, espoleado por lo que acababa de suceder, volví a mi ordenador, puse Google (DuckDuckGo para los alternativos) a toda pantalla, escribí «informe países felices», y ¡ZAS! Efectiviwonder, la dichosa lista con Finlandia en el primer lugar. Os ahorro unos clics: el informe oficial completo lo podéis encontrar aquí mismo.

Tras aterrizar en su tierra, Mikko me envió una foto de la piscina de su pueblo. La usaré como fondo de pantalla cuando llegue agosto.

La lista de países felices

La lista con los países más felices (comprende los años 2017-2019) según la ONU empieza tal que así:

1º Finlandia

2º Dinamarca

3º Suiza

4º Islandia

5º Noruega

(…)

Varios países de habla castellana se encuentran algo más abajo, en las siguientes posiciones:

15º Costa Rica

24º México

26º Uruguay

28º España

¿Vivís en alguno de ellos?

Factores de felicidad

Metiéndonos en harina, vemos que el informe contempla como determinantes (en el capítulo 7) los siguientes puntos:

1. Generosidad del Estado del Bienestar

Por un lado, los impuestos son progresivos y, por otro, existen prestaciones por desempleo, pensiones, ayudas a colectivos menos favorecidos… Esto no redunda solamente en el bien de las personas más pobres, sino en toda la sociedad.

Los ciudadanos pagan unos impuestos viendo que los servicios públicos son satisfactorios, se regula el mercado laboral (para que no haya abusos) y están protegidos si se quedan sin trabajo (tanto el desempleo como el miedo a quedarse sin trabajo restan felicidad).

2. Calidad del gobierno e instituciones públicas

Se tiene muy en cuenta la calidad del gobierno de la nación desde dos puntos de vista.

a) el aspecto democrático en sí mismo: acceso al poder, participación en la elección de los gobiernos, libertad de expresión y de asociación, estabilidad política…

b) y cómo dicho poder es llevado a cabo: la gestión de las leyes, control de la corrupción, efectividad del gobierno en sus actividades, etc.

Tanto la calidad del ejecutivo como la de sus Administraciones Públicas tiene como efecto una mayor satisfacción de la población.

3. Ingresos

Cuanto menor sea la desigualdad de ingresos entre los ciudadanos, mejor. Se prefieren sociedades más equilibradas a sociedades muy desiguales.

4. Libertad

Un cierto grado de autonomía y libertad personal debe ser concedido para que las personas se sientan a gusto (estudios señalan que este bienestar subjetivo redunda en menor ansiedad, agotamiento y salud en general).

5. Confianza y cohesión social

La confianza en los iguales, en el prójimo (tu vecino, tu frutero, el tío del taller que te repara el coche y pide la pieza a Alemania), es vital para el bienestar de las personas. Respecto a la cohesión social, se dice que existe tal cuando hay conexión con otras personitas, tenemos buenas relaciones sociales y nos centramos en el bien común.

Reflexión

Los gurús afirman que la felicidad viene de dentro, que puedes ser feliz incluso en un sitio hostil. Pero este informe y otros apuntan a que los aspectos colectivos son críticos. Una sociedad cohesionada, protegida desde el Estado, con personas individuales que trabajan por el beneficio común (con conciencia de grupo) es más próspera, más feliz.

Vosotros ¿qué factores consideráis importantes para que un lugar contribuya a que seamos más felices? ¿Coinciden con los anteriores?

¿Cómo son los países o ciudades donde vivís? ¿Encajan con lo que hemos leído del informe?

No seáis tímidos y contestadnos en los comentarios o por twitter.

Chiste anti-lunes

Pedimos perdón de antemano por el chiste de hoy:

-Hola ¿está Félix?.

+ No, estoy Tristex.

Feliz lunes

Desde el cuartel general de putolunes.es, os deseamos un buen comienzo de semana y un feliz día en armonía con vuestros coetáneos.

Tened cuidado con el lunes.

Créditos: Piscina de Mikko cortesía de fintuq en Pixabay. Licencia Pixabay.

Referencias:

[1] Por qué los países nórdicos son de nuevo los más felices del mundo. El economista. Accedido en noviembre de 2020. https://www.eleconomista.es/status/noticias/10434094/03/20/Por-que-los-paises-nordicos-son-de-nuevo-los-mas-felices-del-mundo-y-el-porque-de-tantos-suicidios.html

[2] World Happiness Report 2020. World Happiness Report. Accedido en noviembre de 2020. https://worldhappiness.report/

¡Merengue!

Merengue, pero no del de comer… jiji. ¡Del de bailarrrr!

El lunes pasado estuvimos de viaje en la República Dominicana y, claro, nos hemos quedado un chin más.

Si no sabéis la diferencia entre salsa, merengue, bachata, reggaetón… no os preocupéis (en la redacción tampoco sabíamos nada hasta hace unos años). Os ponemos a continuación una canción archiconocida. Así suena un merengue.

(dad al play y la música os irá acompañando a la vez que leéis)

¡¡¡Dame vitamina de cariño!!!

Muy breve historia del merengue

Este género musical bailable aparece en la República Dominicana a finales del siglo XIX. Aunque en sus orígenes bastara con bandurrias y guitarras, se toma como aceptado que un merengue típico es el interpretado por 3 instrumentos: la tambora (origen africano), la güira (local) y el acordeón (influencia europea – de Alemania).

Más adelante, ya en el siglo XX, las grandes orquestas de la época (denominadas big bands) dan un cambio al género y se introducen instrumentos de viento como el saxofón. Aparece el merengue orquestal o merengue de salón.

En una segunda ola, años 80 y 90, artistas concretos toman la batuta y abanderan el divertido merengueo. Una muy extensa lectura sobre el merengue y su evolución la podéis encontrar en el libro que os dejamos en referencias [1].

Por otro lado, tanto la música como el baile del merengue están incluidos en el patrimonio cultural inmaterial de la UNESCO.

(pausad un momento la bilirrubina para que podáis ver el siguiente vídeo jejejeje – en la redacción nos sigue sonando)

Interesante historia del merengue en imágenes.

Cómo bailar merengue

¿Os ha picado el gusanillo? Escuchar música nos alegra mucho los lunes, pero bailar es otro nivel. Vamos a ver unos ejemplos. Si os ve el jefe, bailad con él.

– Cómo movernos a lo dominicano:

Anthony y Carla bailan muy bonito y sencillo.

– Si queréis aprender desde cero, hay videotutoriales a porrón por la red de redes… una pista: es parecido a andar rápido. No tiene más misterio 😉

Aviso, id calentando tobillos, rodillas y caderas:

Minicurso con 3 vídeos. Os lo hacéis y billete para la República Dominicana.

– En unos meses, sin excusas, os quiero ver como Flor y Facu:

Locura bailonga demasiado PRO.

Ya os imagino mañana, entrando por la puerta de la oficina o del taller, así (camisa desabrochada incluida).

Chiste anti-lunes

Ahorita mismo llega lo que más nos anima. El chiste:

Está una cucaracha bailando como loca con todas las patas en alto, y se le acerca otra y le pregunta:

– Morena guapa, eso que bailas ¿es merengue o reggaetón?

+ Es… (sonido de spray) ¡¡¡esnifadita de RAID!!!

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corazón verde
putolunes es salud

nota: putolunes aboga por un estilo de vida saludable. En ningún caso nos haremos responsables de los efectos que podrían producir en los lectores sustancias para el «consumo» animal.

Feliz lunes

Desde la redacción de putolunes.es os deseamos un rítmico y divertido comienzo de semana.

Tened cuidado con el lunes.

Créditos: foto de portada gracias a pxfuel.com. Logo de corazón, de Twitter (CC-BY-4.0).

Referencias:

[1] Pérez De Cuello, C. y Solano, R. (2003). El merengue : música y baile de la República Dominicana. Santo Domingo, D.N., Dominican Republic: Lourdes Saleme y Asociados

Soy una nube.

Nos toca hablar de meditación. Pero, antes, os contamos una breve historia. Poneos cómodos, se tarda un 1 minuto en leer.

(…)

Aún de noche, cristales cubiertos de un velo translucido de rocío, los empleados iban desfilando por la moqueta y ocupando sus lugares. Quizá, un tímido a la par que forzado «buenos días», emanaba de vez en cuando de alguna boca.

Inmersos en el seco invierno, en aquel polígono industrial de las afueras metropolitanas, llegar a la oficina no era tan negativo. Decenas de ordenadores con sus pequeños ventiladores Made in Taiwan generaban una ligera y templada brisa muy de agradecer.

La mañana avanzó con el tedio que se supone propio de un típico lunes laboral. Súbitamente, una frase: «Soy una nube».

De nuevo, «soy una nube».

Una chica a tres mesas de distancia exhalaba el aire muy lentamente moviendo sus brazos cual ave elevada por corrientes térmicas. Solamente repetía esas palabras: «Soy una nube, soy una nube».

«Se han caído los sistemas», lanzó cual jarro de agua fría una compañera suya. El pánico y el caos corporativo se desataba de inmediato sobre todos los allí presentes…

(…)

Vivencia pasada cortesía de nuestro redactor senior aquí en las oficinas centrales de putolunes.

¿Qué es la meditación?

La chica del episodio anterior estaba intentando eliminar tensión a su manera, aunque hay otras formas de prepararse para lidiar con situaciones complicadas. Por ejemplo, la meditación.

La meditación es una práctica ancestral mediante la cual entrenamos la mente con el objetivo de conseguir un estado de claridad y calma emocional. (Sí, no es algo trivial.)

Vamos a ver un vídeo sobre ello, a ver si nos enteramos mejor:

Sabiduría monacal.

Tenéis el mismo vídeo en los archivos de la tele española (por si os falla YouTube), aquí.

Efectos positivos (según estudios):

Parece que tener el hábito de meditar cambia la estructura biológica del cerebro (a mejor). Se produce más actividad en el córtex prefrontal izquierdo del cerebro, área relacionada con la felicidad. Además, reduce el volumen de la amígdala, la cual está ligada al miedo o al estrés. Por todo ello:

– mejoraremos la concentración;

– prestaremos mayor atención al presente;

– haremos gala de una mayor creatividad;

– mejoraremos nuestra auto consciencia y autoestima;

– tendremos más estabilidad emocional;

– sentiremos menos estrés;

– empatizaremos y conectaremos mejor con los demás (qué necesario ésto…);

– podremos reducir la ansiedad y depresión;

– nos hará más felices (se cree que es así según mediciones realizadas de ondas gamma).

¿Cómo meditar?

Para los novatos, si no hemos probado esto de la meditación nunca, lo más fácil será empezar por intentarlo durante 1 minuto:

Solo un minuto. No tenemos nada que perder. ¡Vamos!

¿Lo habéis conseguido? ¿Cómo os encontráis ahora?

En próximos posts nos adentraremos más en la meditación, en los tipos de meditación que hay y cómo hacerlo (si queremos) durante más tiempo.

Chiste anti-lunes

Ahora sí, el chiste:

Un monje zen va a comprar un bocadillo de lomo a un puesto callejero. Se acerca, pide y el vendedor le da la comida.

A continuación, el monje le paga con un billete de 5 euros tibetanos. El vendedor se guarda el billete en el bolsillo.

– El monje zen pregunta: ¿dónde está mi cambio?

+ Y el vendedor le contesta: el cambio debe venir de tu interior…

Feliz lunes

Todo el equipo de putolunes os desea un buen inicio de semana. Ohmmm…

Tened cuidado con el lunes.

Créditos: foto de portada cortesía de «Glg» en wikimedia commons (CC BY-SA 2.0).